Kingsman: El Círculo de Oro («Kingsman: The Golden Circle», 2017)

Matthew Vaughn (Kick-Ass: Listo para machacar) regresa tres años después con la secuela de su último trabajo, la irreverente y sorprendente cinta Kingsman: Servicio secreto. Algo más alejada de los cómics de la serie Kingsman, creados por Dave Gibbons y Mark Millar, esta nueva entrega vuelve a ofrecernos una particular versión del cine de espionaje, tan anárquica y entretenida como su predecesora. Una seña de identidad en la filmografía de Vaughn que le ha convertido en uno de los referentes del cine pop británico actual.

Ha pasado un año desde que los Kingsman salvaran al mundo de los perversos planes de Richmond Valentine. Una noche, Eggsy es asaltado por un ex candidato a Kingsman que no superó las pruebas de admisión. Consigue librarse de él, pero no puede impedir que se infiltre en el sistema informático de Kingsman. Esa misma noche, la sastrería, la casa de Eggsy y el resto de sedes de Kingsman son destruidas con misiles. Los únicos agentes que sobreviven son Merlín y Eggsy que ponen en marcha el «Protocolo del Juicio Final», así es como descubren la existencia de Statesman, una organización secreta estadounidense muy similar a la suya. Juntos intentarán encontrar al responsable del Círculo de Oro, una misteriosa organización que parece estar detrás los ataques.

Esta nueva entrega de las aventuras de los Kingsman se inicia con un prólogo vertiginoso, una larga y frenética escena de acción, muy bien coreografiada y ejecutada que pone las expectativas muy altas para el resto del metraje. La película no defrauda, ofrece un espectáculo a la altura de lo esperado, incluso más loco si cabe, mucho humor, muchísima acción (más de dos horas de duración) y una trama más o menos consistente. Si os gustó la primera parte, os gustara está, aunque también es verdad que ha perdido el factor sorpresa.

Tras una primera hora intensa y llena de fascinantes presentaciones (donde conocemos a una dulce villana psicópata, obsesionada con los años 50 y harta de vivir en la clandestinidad), la creatividad caótica y desordenada de Vaughn se dispara, sus provocativas ideas y la experimentación empiezan a parecer excesivas. Más próximo al dibujo animado que al cine de espías, tiene cabida prácticamente todo, desde una violencia brutal, revólveres de vaquero de gran tamaño y un látigo láser eléctrico a sangrientos perros robots, por muy ridículo que pueda parecer.

Lo bueno es que la película es muy consciente de lo tonto que puede sonar, por lo que nunca se toma nada en serio ni abandona el tono irreverente. Puede que esa sea la razón de que tropiece cada vez que intenta poner una nota más emocional o añadir profundidad a los personajes. Como todo lo relacionado con la recuperación de Harry o los problemas de Eggsy con su novia, no llegan a ser lo suficientemente dramáticos o bien se rebaja el tono dramático con humor.

En cuanto al reparto, grandes actuaciones en un reparto coral lleno de grandes nombres. Repiten en sus papeles Taron Egerton (Eddie el Águila), ya convertido en un Kingsman de pleno derecho. Mark Strong (No confíes en nadie) como Merlín, el experto en informática. Hanna Alström como la princesa Tilde, Edward Holcroft como el vengativo ex Kingsman y Sophie Cookson como Roxy, la compañera de Eggsy. ¡Ah! y Colin Firth (El discurso del rey) que está vivo y sufren de amnesia.

Las nuevas incorporaciones vienen en su mayoría de parte de los Statesman; si los miembros de la sastrería tienen nombres en clave relacionados con el Rey Arturo (Lancelot, Merlín, Arturo…), los Statesman son bebidas como Tequila, Ginger Ale, Whiskey o Champagne que es Jeff Bridges (Comanchería), el jefe. Halle Berry (Marea letal) es la experta en informática, mientras que Pedro Pascal (Narcos) y Channing Tatum (Magic Mike) son agentes de campo. Brillante Julianne Moore (Siempre Alice) como Poppy Adams, una traficante de drogas con una peculiar visión de su negocio. Y para terminar Elton John interpretando una surrealista y divertida versión de sí mismo; atentos porque no se trata de un cameo, tiene varias escenas y diría que ocupa más minutos en pantalla que Channing Tatum.

Imágenes © Twentieth Century Fox.

Mucha diversión y acción sin límites que puede llegar a ser abrumadora, y es que no siempre más es mejor.

Título original: Kingsman: The Golden Circle.
AKA: Kingsman 2.
Dirección: Matthew Vaughn.
País: Reino Unido.
Año: 2017.
Duración: 141 min.
Género: Thriller, acción, comedia.
Intérpretes: Taron Egerton, Colin Firth, Julianne Moore, Mark Strong, Halle Berry, Pedro Pascal, Channing Tatum, Jeff Bridges, Elton John, Emily Watson, Bruce Greenwood, Edward Holcroft, Hanna Alström, Sophie Cookson, Michael Gambon, Poppy Delevingne, Björn Granath, Samantha Womack, Matt Letscher, Tom Benedict Knight, Alessandro De Marco.
Guion: Matthew Vaughn, Jane Goldman, basado en los personajes de Dave Gibbons y Mark Millar.
Música: Henry Jackman, Matthew Margeson.
Fotografía: George Richmond.
Productora: Twentieth Century Fox Film Corporation, Marv Films, TSG Entertainment.
Distribuidora: Hispano Foxfilm.
Calificación por edades: No recomendada para menores de dieciséis años.

Beatriz.